La basura como recurso

La basura como recurso
Proyecto  familiar
Tigre

Basura orgánica:


Herramientas y materiales
Recipiente de aproximadamente 4 litros, con tapa
Pala
Horquilla
Caña
Lombrices de California (Eisenia foetida)

Procedimiento
Colocar los restos orgánicos en el recipiente,  incluimos como orgánico: restos de carnes, servilletas de papel, tapas de latas(degradación mas lenta), cítricos, cáscara de banana, restos de comida en general.

Comenzamos a enterrar la basura en  el perímetro del terreno.
Con una pala,  hacer un pozo de aproximadamente 30 cm de profundidad por 30cm de diámetro,  colocar los restos orgánicos en el pozo y tapar bien, para evitar que animales puedan desenterrar los restos de basura.
Marcar el primer y último  pozo con algún elemento (rama seca, caña etc.), esto nos servirá  como guía para saber donde hacer el próximo pozo.
Es aconsejable enterrar los restos orgánicos cada dos días como máximo, evitando así la proliferación de insectos y  malos olores, mientras almacenamos  los restos en el recipiente.
Con este sistema, en  aproximadamente 4  meses,  la basura  orgánica, estará compostada.
Procedemos a colocar  aproximadamente 500 gramos  de lombrices de California (Eisenia foetida) en el primer pozo.
La lombriz roja californiana consume una cantidad diaria de alimento equivalente a su peso, más de la mitad de este consumo se convierte en humus.
El humus es  materia orgánica  degradada a su último estado de descomposición por efectos de microorganismos. El mismo se  encuentra químicamente estabilizado, por lo que regula la dinámica de la nutrición vegetal en el suelo.
La lombriz roja de California mide alrededor de 8 centímetros, en estado adulto pesa 8 gramos. Es hermafrodita, y puede reproducirse durante todo el año. Alcanza su madurez sexual a los dos o tres meses de vida y cada 10 días deposita una cápsula de 2 a 20 huevos. Vive 15 años aproximadamente.
Además de la basura orgánica, para alimentar a las lombrices se puede utilizar  malezas, pastos, hojarascas, poda, cenizas, simplemente colocándolos con una orquilla, debajo de los árboles, arbustos y cercos. Esta materia vegetal proporciona humedad y nutrientes que  lo “endulzan y calientan”, mientras se van descomponiendo.
Las hojarascas, son aquellas hojas que han cumplido su ciclo de vida en la planta y al caerse o cortarse se incorporan como desecho orgánico al suelo, mantienen la humedad y aportan nutrientes.
No es recomendable usar hojas del  pino (pinus radiata) o del eucaliptos (Eucaliptos globulus) ya que contienen toxinas que dañan el suelo.
Enterrar la basura es una actividad productiva, viable y benéfica que no requiere inversión, mejorando las caracteristicas  físico-químicas del suelo.